Por: Ubaldo de Casanova y Todolí*.
La Provincia de León
La provincia de León ocupa una superficie de 15.581 Km2, por lo que es la más extensa de las que conforman la Comunidad Autónoma de Castilla y León. Limita al Norte con Asturias y Santander, al Este con Palencia, al Sur con Zamora y Valladolid y al Oeste con Lugo. Se caracteriza por la gran diversidad paisajística, producto de la combinación de factores tanto físicos como humanos. Su conformación orográfica hace que se pueda dividir en multitud de comarcas en función de la geografía, las costumbres, etc. Sin embargo, hay quienes se aventuran en presentar sólo cuatro grandes zonas, la Montaña, el Bierzo, los Páramos-Riberas y la Cabrera, en contraposición a aquellos que llegan a señalar veinticuatro zonas diferentes con las particularidades que las caracterizan. Sin embargo, desde el punto de vista estructural, el relieve de la provincia se organiza en torno a dos grandes unidades morfológicas: la Montaña y la Meseta. Sea como fuere, todas ellas tienen una gran personalidad. La Maragatería, comprendida en el área contigua a Astorga y la que presenta un mayor bagaje étnico diferenciador. Los Ancares, que han preservado determinadas fórmulas constructivas y normas comunales. Babia, famosa por la crianza de ganado y en especial las yeguadas. Laciana, comarca eminentemente minera. La Cabrera, marginal, secularmente aislada, lo que ha comportado cierta fosilización de sus arcaísmos populares y constructivos. Las Omañas, comarca de transición entre lo berciano y lo leonés. El Bierzo, la única comarca de Castilla y León reconocida en el Estatuto de Autonomía, adoptando de lo gallego muchas de sus características paisajísticas y culturales. El Páramo, situado en el mismo corazón de la provincia. La Montaña de Riaño, que ha asentado su economía en la ganadería. Y Tierra de Campos, la de mayor similitud con el paisaje castellano.

Mosaico Romano, Astorga
Astorga es la antigua Astúrica Augusta romana y la capital de la Maragatería. Encrucijada de caminos, se encuentra en la antigua Vía de la Plata y en el Camino de Santiago, por lo que conserva una rica historia y un gran patrimonio artístico que, en principio, se inicia con los restos conservados de la época romana. Hay que hablar de un par de fosos asociados a un campamento militar de origen romano encargado de controlar el territorio astur anexionado; de una red viaria e infraestructura sanitaria después de que dicho asentamiento adquiriese nuevas funciones y se convirtiese en núcleo urbano; las termas o baños públicos donde se desarrollaba una buena parte de las relaciones sociales construidas durante el siglo I; el foro, que coincidía en parte con la actual Plaza Mayor, centro de la actividad pública; las murallas de fines del siglo III o inicios del IV que conservan 27 cubos circulares distribuidos a intervalos de 15 metros; la puerta romana situada en el extremo septentrional del lienzo Noroeste formada por un vano de cuatro metros de ancho entre dos cubos semicirculares cimentados sobre sillares de granito, el Aedes Augusti, la Ergástula (gran pórtico abovedado de incierto uso, hoy dedicado a Museo Romano), etc.
El desarrollo del Camino de Santiago a partir del siglo IX vinculó la vida de Astorga a la peregrinación hacia Santiago. Junto a esta vinculación, que en principio era plenamente religiosa, el Camino comportó la llegada de maestros encargados de la fábrica catedralicia, de autores de retablos flamencos, además del surgimiento de cofradías de asistencia y penitenciales, de las cuales algunas perviven. El Camino cruza la ciudad de Sur a Norte. Va de la Puerta Sol a la Puerta Obispo. En cuanto a la Vía de la Plata, es una calzada de origen romano que unía las ciudades de Astúrica Augusta y Emérita según el itinerario antonino. Comunicaba de Sur a Norte y fue una buena vía de acceso, no sólo de los peregrinos sino de las diferentes culturas procedentes del Norte de Africa.
La construcción de la Catedral de Santa María se inició en 1471 sobre una antigua catedral románica de los siglos XI-XIII, de la que se pueden encontrar restos como la capilla románica que se encuentra situada en el tramo contiguo a la entrada renacentista o la capilla de Santa Marina, en el actual Museo Catedralicio. La cabecera, de estilo gótico florido español, tiene similitudes con las catedrales de Sevilla y Salamanca. La fachada lateral, construidas en el atrio, es obra de Rodrigo Gil de Hontañón, así como dos capillas interiores. El estilo contrasta con el gótico anterior. La fachada principal es una obra realizada por Pablo Antonio Ruiz a partir de 1708 sobre la anterior románica. Las dos torres están unidas a la fachada de modo que son en el interior sendas capillas abiertas a la nave lateral. La torre vieja tiene fecha de 1678 y la torre nueva de 1692. No hay que olvidar la imagen de Pedro Mato, un maragato que se ha convertido en una de las insignias de la ciudad.

Pedro Mato, Catedral de Astorga
En el interior, el retablo mayor es obra de Gaspar Becerra. El coro comenzó a construirse en 1515. La Virgen de la Majestad, que se encuentra en la capilla de la Majestad, se enmarca en un retablo del siglo XVII. La talla está considerada como uno de los más claros ejemplos de tipología bizantina dentro de las vírgenes españolas del siglo XII. A los pies de la Catedral se encuentra el retablo hispanoflamenco, que pudiera ser de 1530.
El primitivo Palacio Episcopal fue construido en tiempos de doña Urraca al donar en 1120 un solar en el interior del recinto de las murallas. Después de realizar diversas readaptaciones se incendió, con lo que comenzaron las gestiones para reedificar una nueva residencia episcopal, finalmente encargada a Antoni Gaudí en 1887. Los decorados de los interiores son obra del fresquista Fernando Villotas, el ceramista Jiménez de Jamuz, el vidriero francés José Maumejean y el escultor Enrique Marín. De volumetría cúbica, tiene cuatro torres cilíndricas y salientes, como son el pórtico de acceso, de monumentales arcos paraboloides abocinados sobresaliendo poderosamente del conjunto, y el ábside de la capilla, de marcado estilo gótico, está orientado de Sureste a Noroeste y apoya el lateral Nordeste sobre la antigua muralla. El interior sigue las pausas volumétricas del exterior. Destaca la luminosidad que se le dio a los diferentes pisos. Todas las dependencias se desarrollan alrededor de un hall central que tenía que estar iluminado mediante un juego de lucernas triangulares de formas mudéjares, pero que no fueron capaces de realizar sus continuadores, haciendo un hall ciego, sin luz. A través del foso se iluminan los sótanos. El estilo mudéjar aparece en la mayoría de los ventanales y en los capiteles de la capilla. La decoración de las estancias principales combina vitrales, pintura, dorados, esgrafiado, ladrillo visto, azulejos decorativos y piedra labrada.

Ayuntamiento de Astorga
Por lo que respecta al Ayuntamiento, es una construcción realizada en 1675 por Manuel de la Lastra siguiendo una tipología herreriana semejante a la fachada catedralicia. La fachada barroca tiene torres laterales y chapiteles sobre ellas de clara ascendencia flamenca. Presidiendo todo el conjunto se encuentra una espadaña central en la que se ubica el tradicional reloj de los maragatos Juan Zancuda y Colasa, obra del relojero Bartolomé Fernández realizada en el siglo XVIII, que son figuras articuladas que al golpear la campana marcan las horas. Bajo las torres se conservan los calabozos en los que permanecían los reos esperando ser sometidos a juicio. Fue remodelado y ampliado a finales del siglo XIX y en 1995 concluyó la segunda reforma, que modificó su estructura.
La Plaza Mayor es de planta cuadrangular y está asentada sobre lo que pudo ser el foro romano. Conserva algunos edificios de la época de su construcción y los martes por la mañana se convierte en el centro comercial de la comarca con el mercado de alimentos, artesanía local, etc.
El Palacio Episcopal, que conjuga el estilo modernista caracterizado por la plasticidad de las formas y espacios con la recuperación del gótico medieval, hizo que surgiera todo un conjunto de arquitectos que tomaron como modelo la obra gaudiniana y sus principios de recuperación de estilos medievales y modernistas. De este modo, junto a la muralla romana y tomando dirección al barrio de Puerta del Rey, está la Casa Granell, propiedad de José Granell, industrial del chocolate, construida en la segunda mitad de siglo XX según planos de Antonio Palacios Ramilo, arquitecto del Palacio de Comunicaciones de Madrid. Contemporánea a este edificio es la Iglesia de San Andrés, también realizada bajo la influencia de Gaudí, diseñada por Fernández Reyero en ladrillo en la segunda mitad de siglo XX para albergar el gran retablo barroco del siglo XVIII perteneciente a la desaparecida Iglesia de San Miguel. Lo preside el Cristo de los Afligidos, talla barroca procesionada por la Cofradía de la que es titular.
Reseña sobre el autor
Ubaldo de Casanova y Todolí nació en Barcelona, aunque reside en Salamanca y desarrolla su vida profesional en Valladolid. Licenciado en Ciencias de la Información y Doctor en Filosofía y Letras, ha sido profesor de Historia Moderna en la Universidad de las Islas Baleares. Es académico correspondiente de la Academia Mallorquina de Estudios Genealógicos, está en posesión de diversos premios literarios y es autor de más de una veintena de publicaciones sobre diversas temáticas, desde la historia y el periodismo al género literario de la narración. Entre sus últimas obras destacan “Los Orígenes de Castilla y León” (2008) y “Castilla y León, momentos culminantes para la constitución de un reino” (2008).